La mejor forma de terminar de comer en el Burger King es tomando un oreo shake, con nata o sin ella sigue siendo una ambrosía, una dulzura afrodisíaca que se deshace en la boca otorgando adicción y queriendo tomarlo todos los días.
O-re-o shake, make me sing, make me sing
O-re-o shake, me hace feliz, me hace feliz
O-re-o shake, make me sing, make me sing
O-re-o shake, me hace feliz, me hace feliz
O-re-o fucking shake, shake shake shake...
O-re-o shake, make me sing, make me sing...